Cine negro - Festival Pamplona Negra
28 mayo, viernes
20:15 h · Sala de Cámara
Organiza:
Baluarte y Filmoteca de Navarra
Brighton Rock
Dirección: John Boulting
Dirección: John Boulting
Guion: Terence Rattigan y Graham Greene, a partir de una novela de este último.
Fotografía: Harry Waxman (ByN)
Música: Hans May
Intérpretes: Richard Attenborough, Hermione Baddeley, William Hartnell, Harcourt Williams, Wylie Watson, Nigel Stock, Virginia Winter, Reginald Purdell, George Carney
País:Reino Unido
Año: 1948
Duración: 92 minutos / VOSE
SINOPSIS
Pinkie Brown (Richard Attenborough) es un gangster que lidera una pandilla de degenerados malvivientes. Después de cometer un asesinato, intenta manipular a una amiga suya para que le suministre una coartada.
Brighton Rock es quizás la obra que marca el comienzo del noir puramente británico, alejado de las pautas que marcaban las grandes producciones noir de clase A y serie B americana. El cine noir puramente británico ostenta como elemento característico el hecho de apoyarse en una trama de suspense “criminal” para elaborar un retrato de la sociedad de la época siendo el hecho social una singularidad que dota de personalidad propia a estas magníficas producciones. Son ejemplo de ello El tercer hombre, Larga es la noche de Carol Reed o esa obra maestra que realizó en Gran Bretaña Jules Dassin: Noche en la ciudad, ambas vistas el pasado mes de enero en la testimonial Pamplona Negra de este año.
Brighton Rock es “un seminal ejercicio de estilo que dio lugar al concepto de cine negro británico, por lo que nos hallamos ante una película violenta, sombría, estrictamente británica, mística (el hecho religioso está muy presente en las motivaciones de los personajes), de ritmo irregular en el que la velocidad sincopada mezcla el tono trepidante con el introspectivo y que cuenta con una bellísima fotografía de espacios exteriores (preciosos son los planos en el hipódromo, en la feria, en el muelle) que intercala con unos precisos planos de interior, no solo de espacios estrechos, sino que los más precisos y preciosos son los tomados en los pubs y restaurantes británicos, en los que los contrapicados, ágiles travellings, claro oscuros y planos cenitales técnicamente sublimes surten de atractivo fílmico a la cinta. Sin duda un descubrimiento para los amantes del cine de género alejado de los convencionalismos establecidos por el cine clásico americano” (Rubén Redondo, Cinemaldito)