A Blanca Portillo le perseguía desde hace tiempo la imagen del Tenorio convertido en icono abanderado de la libertad y la transgresión que durante tantos años se ha subido a los escenarios de todo el mundo. “Tenorio no es un héroe –dice Portillo–. Tenorio es alguien que huye de su propio vacío llevándose por delante todo aquello que se cruce en su camino. No es un luchador en busca de un mundo mejor, de un cambio en el sistema, no es un buscador de belleza”. Éste es el Tenorio que Portillo ha subido al escenario. Un modelo de destrucción, de falta de empatía, de crueldad, de desprecio por la vida propia y ajena. Un ser incapaz de construir y vivo retrato del desprecio por los demás. En esta producción de Don Juan Tenorio han colaborado, entre otros, la Compañía Nacional de Teatro Clásico y el Teatro Calderón de Valladolid, donde se estrenó a primeros de noviembre. Un extenso reparto de actores pondrá en escena esta nueva visión de uno de los personajes más clásicos de la historia del teatro.
Dirección y espacio escénico: Blanca Portillo
Versión: Juan Mayorga
Iluminación: Pedro Yagüe
Música original y espacio sonoro: Pablo Salinas
Coreografía: Verónica Cendoya
Vestuario: Marco Hernández
Con: José Luis García-Pérez, Eduardo Velasco, Miguel Hermoso, Juan Manuel Lara, Ariana Martínez, Tania Watson, Luciano Federico, Beatriz Argüello, Daniel Martorell, Alfonso Begara, Francisco Olmo, Alfredo Noval, Raquel Varela, Rosa Manteiga, Eva Martín