Junto con Fuenteovejuna (Lope de Vega), esta creación de Calderón de la Barca es la obra más universal y representada del teatro clásico del Siglo de Oro español. Un drama sobre el honor, el abuso de poder, la dignidad y la justicia. Una obra actual llena de frases que han quedado en la memoria colectiva (Al rey la hacienda y la vida/ se ha de dar, pero el honor/ es patrimonio del alma/y el alma sólo es de Dios). Una obra fundamental del repertorio clásico en una puesta en escena llena de ritmo donde resuena con fuerza el verso clásico, que pone el acento en la actualidad del drama. La Compañía Nacional de Teatro Clásico afronta por tercera vez este texto en su corta historia. Veinte actores y músicos en escena, con ese grandísimo actor que es Joaquín Notario a la cabeza, en el papel del alcalde Pedro Crespo, en la estela de todos los que antes lo encarnaron en el teatro, en el cine y en la televisión: Jesús Puente, Fernando Fernán Gómez, José Bódalo, Guillermo Marín, Ismael Merlo, Alberto Closas o Rafael Rivelles.
Reparto por orden de intervención
Rebolledo - David Lorente
Soldado / Escribano - Rafael Ortiz
Soldado - David Lázaro
La Chispa - Isabel Rodes
Capitán don Álvaro de Ataide - Jaime Soler
Sargento - Pedro Almagro
Don Mendo - Miguel Cubero
Nuño - José Juan Rodríguez
Pedro Crespo - Joaquín Notario
Juan, hijo de Pedro Crespo - David Boceta
Isabel, hija de Pedro Crespo - Eva Rufo
Inés - María Besant
Don Lope de Figueroa - José Luis Santos
Soldado / Rey Felipe II - Alberto Gómez
Soldado/ Labrador - Adolfo Pastor
Villano/ Soldado - Eduardo Aguirre de Cárcer
Músicos
Percusión: Eduardo Aguirre de Cárcer
Viola de gamba: Alba Fresno
Equipo artístico
Versión, dirección y espacio sonoro: Eduardo Vasco
Escenografía: Carolina González
Iluminación: Miguel Ángel Camacho
Selección de vestuario: Lorenzo Caprile
Asesor de verso: Vicente Fuentes
* Duración aproximada: 1 hora 55 minutos (sin descanso)